Tras cada limpieza profunda sentimos paz y satisfacción. El orden que vemos en cada rincón nos hace sentir como de la realeza, pero ahora viene la parte más difícil: Mantener el espacio tal y como está. Y es lo más difícil porque ordenar nuestro hogar tal vez no sea uno de nuestros pasatiempos favoritos.
Para darte una mano, buscamos los errores típicos al ordenar nuestra casa:
No tener espacio para crecer
En ocasiones organizamos tanto que hasta los espacios de almacenamiento están a tope. Este es un gran error, porque a medida que vayas comprando cosas no tendrás espacio para guardarlas. Intenta dejar el 20% de espacios vacíos, para poder guardar lo que compres a futuro. La mejor opción para lograrlo es donar lo que ya no uses o necesites.
Olvidar que otros viven contigo
La excesiva organización es tan o más perjudicial que la dejadez. Y si tus nuevas reglas de organización son muy complicadas o toman mucho tiempo, nadie las seguirá. Facilítale el trabajo a los miembros de tu familia, para que te ayuden sin quejarse… O al menos sin quejarse tanto.
Otra cosa que puede ayudar es explicarle a cada quien cuál es su tarea en cuanto a la organización del hogar. Así, todos estarán en la misma línea y podrán entenderse mejor.
Guarda todo en cuanto termines de usarlo
Saca de tu cabeza la mentalidad “de momento lo dejo ahí”. ¡Es peligrosa porque forma malos hábitos! Para ser organizado, debes poner en su lugar todo lo que tocas. Ya sabes, en lugar de dejar tu cartera en la silla, guíndala en el clóset o perchero.
Sigue la regla de “lo que entra por lo que sale”
¿Cómo funciona? Por cada articulo nuevo que traigas a casa, otro debe salir. Es decir, si compras un florero, regala otro viejo o algo que sea de un tamaño similar. Una vez empieces a aplicarla notarás lo importante que es para prevenir el desorden.
Dedica 5 minutos a tu casa todos los días
Una vez que tengas todo en su sitio, dedicar una sesión diaria de limpieza de cinco minutos será mucho más fácil. Es esencial para mantener el orden en tu hogar y, con el tiempo, esta limpieza rápida se convertirá en un hábito diario.